México Republicano expresa su enérgico rechazo a cualquier acto de violencia cometido bajo el pretexto de manifestación, particularmente cuando ocurre en naciones que han ofrecido hospitalidad y oportunidades a ciudadanos mexicanos. Tales acciones no reflejan el sentir de un pueblo históricamente caracterizado por su gratitud, dignidad y respeto a las naciones amigas.
Reprobamos categóricamente las expresiones violentas dirigidas contra autoridades estadounidenses, ocurridas en el contexto de protestas relacionadas con la política migratoria de ese país. La protesta pacífica y legítima forma parte del ejercicio democrático; sin embargo, la violencia nunca podrá ser considerada un medio válido de expresión ni una vía legítima de presión.
La migración es un fenómeno complejo que debe ser comprendido en toda su profundidad. La mayoría de quienes emigran lo hacen como resultado de la pobreza, la inseguridad o la falta de oportunidades. Por ende, corresponde a los gobiernos de origen atender con seriedad y compromiso las causas estructurales que obligan a sus ciudadanos a abandonar su país. Lamentablemente, esta responsabilidad ha sido reiteradamente eludida mediante declaraciones retóricas que no se traducen en acciones concretas, perpetuando así las condiciones que propician el éxodo migratorio.
Si bien es comprensible que una persona busque mejores condiciones de vida fuera de su país, también es legítimo que cada Estado, en ejercicio de su soberanía, defina y aplique políticas migratorias que resguarden su seguridad, economía y marco legal. No puede exigirse hospitalidad sin responsabilidad ni respeto a la ley.
México Republicano hace un respetuoso pero firme llamado a los gobiernos de México y Estados Unidos para que refuercen los canales de diálogo y cooperación en materia de migración laboral. Es urgente avanzar hacia acuerdos que reconozcan la valiosa aportación de los trabajadores mexicanos a la economía estadounidense, sin que ello implique cargas desproporcionadas para dicho país, y garantizando a su vez condiciones dignas, legales y ordenadas para quienes contribuyen de manera activa al desarrollo de ambos pueblos.
Reiteramos que el pueblo mexicano, en su mayoría, es profundamente agradecido. La gratitud, el trabajo honesto y el respeto a las leyes son valores fundamentales que nos definen y que debemos preservar, tanto en territorio nacional como en el extranjero.
Atentamente,
“Libertad, Grandeza y Fuerza”
Juan Iván Peña Neder
Presidente
Gricha Raether Palma
Secretario General