México Republicano expresa su profunda preocupación ante la reciente visita de la Secretaria General del partido oficialista Morena a la isla de Cuba, donde suscribió una serie de acuerdos con el dictador Miguel Díaz-Canel y con el Partido Comunista de dicha nación. Esta acción, realizada en nombre del partido en el poder, envía un mensaje equivocado y riesgoso tanto para nuestra política exterior como para la estabilidad de nuestra relación con los Estados Unidos, nuestro principal socio comercial y estratégico.
Cuba es un país rezagado en los principios de la democracia liberal, y su régimen ha sido señalado de manera constante por organismos internacionales, como el Departamento de Estado de Estados Unidos y la Organización de los Estados Americanos, por violaciones sistemáticas a los derechos humanos y por su alejamiento de las libertades fundamentales. La firma de acuerdos políticos por parte de Morena con un gobierno dictatorial representa una señal altamente contraproducente en el actual contexto geopolítico.
Resulta especialmente alarmante que este gesto se produzca mientras el gobierno de los Estados Unidos ha manifestado su disposición para colaborar con México, incluso en temas sensibles como la asistencia militar para combatir el control territorial que ejercen los cárteles sobre vastas regiones del país. Es precisamente en este momento cuando México debería consolidar su relación con las democracias occidentales, y no enviar señales de complacencia con regímenes que representan todo lo contrario a los valores republicanos y democráticos.
Rechazar a los Estados Unidos bajo el argumento abstracto de una soberanía mal entendida, al tiempo que se abraza a regímenes antidemocráticos como el cubano, o a agrupaciones ideológicas como el Foro de São Paulo y el Grupo de Puebla—abiertamente promotores del comunismo y enemigos del modelo democrático liberal—coloca a México en una posición de aislamiento y vulnerabilidad geopolítica innecesaria.
Nuestro país no vive en tiempos de autarquía ni cuenta con el margen diplomático de décadas pasadas. Hoy dependemos profundamente de las remesas, del comercio exterior, y enfrentamos una incapacidad real para ejercer control sobre la totalidad del territorio nacional. En este contexto, el gobierno mexicano debe conducirse con realismo estratégico y responsabilidad histórica, y no con un chauvinismo nostálgico que distorsiona las prioridades nacionales.
Desde México Republicano instamos al gobierno federal y a su partido a rectificar inmediatamente el rumbo, a deslindarse de alianzas con regímenes que violan los derechos humanos, y a fortalecer los vínculos con las democracias de nuestro hemisferio. El camino de México debe ser claro.
Nuestro país no vive en tiempos de autarquía ni cuenta con el margen diplomático de décadas pasadas. Hoy dependemos profundamente de las remesas, del comercio exterior, y enfrentamos una incapacidad real para ejercer control sobre la totalidad del territorio nacional. En este contexto, el gobierno mexicano debe conducirse con realismo estratégico y responsabilidad histórica, y no con un chauvinismo nostálgico que distorsiona las prioridades nacionales.
Desde México Republicano instamos al gobierno federal y a su partido a rectificar inmediatamente el rumbo, a deslindarse de alianzas con regímenes que violan los derechos humanos, y a fortalecer los vínculos con las democracias de nuestro hemisferio. El camino de México debe ser claro.
Atentamente,
“Libertad, Grandeza y Fuerza”
Juan Iván Peña Neder
Presidente
Gricha Raether Palma
Secretario General